Con justicia social y corazón por la niñez, Delia Enriquez fortalece el bienestar de las infancias en Durango

6/5/20252 min read

Durango, Dgo.— Desde el Congreso del Estado, la diputada Delia Enriquez ha asumido con profundo sentido social su papel como defensora de los derechos de la niñez duranguense, guiada por los principios de justicia, igualdad y bienestar del pueblo, valores que han dado forma a la transformación del país en los últimos años.

“Las niñas y los niños son el presente de Durango, no podemos permitir que crezcan entre el miedo y la indiferencia. Es responsabilidad del Estado protegerlos, y de nosotros como legisladores, garantizar que su voz se escuche en cada decisión”, expresó Enriquez durante su intervención con motivo del Día Internacional de los Niños Víctimas Inocentes de Agresión.

En sintonía con los principios de la Cuarta Transformación, la legisladora morenista ha insistido en que el gobierno no puede seguir siendo omiso ante el sufrimiento infantil. Por ello, ha propuesto reforzar los presupuestos para programas de atención psicológica y acompañamiento a menores víctimas de violencia, así como garantizar el acceso equitativo a servicios educativos y de salud, incluso en las comunidades más alejadas.

“La infancia no debe ser un privilegio de quienes nacen en mejores condiciones, sino un derecho para todos. Gobernar con el pueblo y para el pueblo significa también proteger a nuestros niños y niñas desde el primer día de vida”, afirmó.

Delia Enriquez ha impulsado también la creación de un Observatorio Estatal de la Niñez, que permitirá monitorear el cumplimiento de los derechos infantiles, recoger denuncias ciudadanas y fortalecer la vigilancia institucional contra el abuso y la negligencia.

Durante los últimos meses, ha recorrido municipios y comunidades para escuchar directamente a las familias. Ahí, ha encontrado historias que duelen, pero también esperanza. “Una madre me dijo: ‘Mi hijo ya no tiene miedo de ir a la escuela’. Eso me da fuerza para seguir”, compartió.

Para Enriquez, la transformación empieza desde abajo y con el corazón por delante. “No podemos fallarles a nuestras infancias. Nuestra lucha es por un Durango más justo, donde todos los niños tengan la oportunidad de crecer con amor, en paz y con sueños posibles.”